Muchas personas se acercan en los seminarios y conferencias en Latinoamérica para contarme cosas cómo: "Xavi me encantó tu conferencia y salgo muy motivado para hacer las cosas, pero qué puedo hacer para no bajar la motivación," otros me dicen… "Xavi cómo encuentro la motivación para hacer las cosas, es más quisiera tener tu motivación".
Todo lo que vas a leer en este post, es totalmente real y aplicado por muchas personas que salen de mis entrenamientos y mentoring uno a uno.
Primero quisiera hacer un ejercicio contigo y pedirte que visualices un momento en tu vida durante el cuál estabas muy motivada/o, te sentías con la fuerza necesaria para enfrentar los problemas y sentir que realmente te podías comer el mundo.
¿Qué pasó?¿En qué lugar estabas?¿Qué estabas haciendo?¿Cómo sabías que sentías motivación?¿En qué se diferencia ese momento comparado con un momento de pereza y apatía?
Wow, muchas preguntas, sin embargo si te das cuenta, todo pasa se genera en tu cabeza, algo que repito constantemente “lo que pones en tu mente pones en tu vida” al cerebro no le interesa, es más ni sabe diferenciar entre realidad y ficción, eso quiere decir que si quieres deprimirte solo necesitas pensar en momentos en tu vida que has sentido depresión….pruébalo…ojo, no por mucho tiempo para que no te sientas demasiado mal…jejeje
Esa es la idea principal de esto, estamos a un paso de conseguir lo que quieras en la vida…
Veamos, si por la mañana te levantas y sientes que el mundo se te acaba, te sientes derrotada, te sientes sin fuerzas, porque estarás de acuerdo conmigo que si hay esos días…Una mañana negra en la que no quieres hacer nada, si esto se prolonga por demasiados días, tenemos la receta perfecta para un ser humano amargado y muy depresivo…
Y si al contrario, al primer momento en que levantas, sientes esa sensación, no tan agradable, respiras profundo, analizas las razones por las que te sientes de esa manera y DECIDES traer a tu mente sensaciones agradables, momentos en los que sentías alegría y momentos en los que sentías que realmente podías comerte el mundo. ¿Qué crees que pase?...Exactamente las cosas cambian radicalmente y sentirás una emoción muy peculiar, una sensación agradable, ahora, solo tienes que hacer esto la mayor parte del tiempo y tu motivación cada vez iría en aumento.
Ahora bien, esta es una de las maneras en las cuales puedes sentir emoción y motivación para hacer las cosas, si vamos a entender la palabra motivación sería…tener un motivo para la acción, eso quiere decir tener razones por las cuales sentirte bien.
¿Cuál es tu motivo para tomar acción respecto al dinero?
¿Cuál es tu motivo para tomar acción respecto al amor?
¿Cuál es tu motivo para tomar acción respecto a la salud?
¿Cuál es tu motivo para tomar acción respecto al emprendimiento?
¿Cuál es tu motivo para tomar acción respecto al buscar soluciones?
¿Comprendes las preguntas claves que necesitas hacerte?…Si no tienes respuesta a estas preguntas es buen momento para hacerlas…recuerda que me encantará ver tus comentarios y saber qué es lo que te motiva.
La motivación para que funcione de manera automática y no tengas que hacerte estas preguntas, va conectado directamente con tu propósito de vida, si lo tienes realmente claro, es la motivación perfecta para hacer las cosas, de hecho las personas que han pasado por el programa Insight, que lo hacemos una vez por año, han descubierto su propósito de vida y la vida se le ha hecho mucho más fácil porque ya tienen claro lo que desean hacer y para qué vinieron a este mundo.
Si te das cuenta, ya no necesitas pensar en la motivación porque el propósito es tan fuerte que todo en tu vida se alinea para que seas feliz haciendo lo que haces y la motivación se nota en cada acción y decisión que tomas.
¿Quieres motivarte?
Tienes dos opciones poderosas, la primera es trabaja con tu mente y la segunda descubre tu propósito de vida…¿fácil cierto? Jajaja, sí estoy de acuerdo que no es tarea tan sencilla por eso estoy aquí para ayudarte con esta tarea, cuentas conmigo…
Espero tus comentarios para saber si ya has descubierto tu propósito de vida y ya sabes lo que realmente te motiva.
Un abrazo y nos vemos en la siguiente entrega.
